
Mientras los poderes fácticos buscan mantener la inercia, solo la doctrina, la coherencia histórica y la convicción moral pueden abrir camino para que el peronismo recupere su fuerza transformadora.


Mientras los poderes fácticos buscan mantener la inercia, solo la doctrina, la coherencia histórica y la convicción moral pueden abrir camino para que el peronismo recupere su fuerza transformadora.

Tras la derrota, el peronismo vuelve a mirarse en su espejo más incómodo: el triunfalismo. Entre la soberbia de algunos dirigentes y la advertencia de Rodolfo Walsh, el movimiento enfrenta el desafío de reencontrarse con su pueblo.

Los nuevos piratas no buscan oro, sino la posibilidad de un futuro distinto.

La verdadera política es la política internacional.

La guerra comercial de Trump, el ascenso de China y la caída del orden liberal marcan el fin de la globalización tal como la conocimos. El mundo que imaginó Perón empieza a tomar forma.

A 49 años del golpe cívico-militar de 1976, es necesario mirar más allá del horror represivo y reconocer otra consecuencia estructural del terrorismo de Estado: la introducción del narcotráfico como negocio político y económico protegido por el poder. Una trama de sangre, dinero y dependencia que aún hoy sigue marcando el destino de la Argentina.

Los nuevos piratas no buscan oro, sino la posibilidad de un futuro distinto.

Tras la derrota, el peronismo vuelve a mirarse en su espejo más incómodo: el triunfalismo. Entre la soberbia de algunos dirigentes y la advertencia de Rodolfo Walsh, el movimiento enfrenta el desafío de reencontrarse con su pueblo.

Mientras los poderes fácticos buscan mantener la inercia, solo la doctrina, la coherencia histórica y la convicción moral pueden abrir camino para que el peronismo recupere su fuerza transformadora.